Viene de: Curso de Timonel – Los rumbos (clase 9).
Como reducir el velamen
Cuando las inclemencias climáticas comienzan a hacerse sentir y el viento sopla con mayor intensidad es preciso que modifiquemos el velamen a fin de adaptarlo a las condiciones reinantes. Como habíamos visto con anterioridad, para evitar la “escora” excesiva en un barco, se hace necesario incrementar el “par de adrizamiento” o bien reducir el “par de escora”, y es esto último lo que hacemos cuando decidimos “achicar el paño”.
En el caso de la vela proel, habíamos mencionado que algunas embarcaciones cuentan con un mecanismo “enrollador”, dispositivo de suma utilidad ya que evita que llevemos a bordo una gran cantidad de velas de diferentes tamaños. De no contar con él, estaremos obligados a ir reemplazando unas por otras según la intensidad de los vientos reinantes. Si bien es cierto que este adminículo también puede utilizarse para la vela mayor, es menos frecuente su utilización por su excesivo costo y su dudoso resultado. En el caso de “enrolladores de mayor”, los hay de dos tipos: para enrollar dentro del palo o dentro de la botavara.
La operación más utilizada por la mayoría de las embarcaciones es la llamada “toma de rizos”. Con este propósito, la vela mayor cuenta con una serie de perforaciones u “ollaos” alineados en una faja o “mano de rizos”. De acuerdo al tamaño y al tipo de vela, se puede contar con una, dos y hasta tres manos de rizos, según convenga. La maniobra consiste en filar la escota para que la vela quede completamente desventada, cazando el amantillo para que la botavara no se caiga.
Acto seguido, se arría hasta que la “faja de rizos” elegida quede a la altura de la botavara, donde se fija convenientemente con un herraje en el ollao próximo al gratil (anzuelo). Con posterioridad se cobra el “amante de rizos”. Este cabo, que tiene su extremo fijo al penol de la botavara, atraviesa el último ollao de la faja de rizos y vuelve a ingresar a la botavara corriendo sobre un motón estratégicamente ubicado. Dicho cabo emerge de la botavara nuevamente a través de un orificio practicado cerca del palo. Una vez cobrado con fuerza el amante de rizos, se hace firme en la mordaza o cornamusa correspondiente. La operación finaliza izando la vela “rizada” y orientándola nuevamente con la escota.
Es conveniente a posteriori “atar” la vela sobrante a la botavara, a fin de evitar que cuelgue y se deteriore.
Como aumentar el velamen
Cuando se navega con vientos portantes de baja intensidad y se hace imprescindible aumentar de forma considerable la superficie vélica, es de suma utilidad contar con un “spinnaker”. Esta vela de dimensiones gigantes, construída en tela de nylon ultraliviano (generalmente de colores vivos) incrementa de forma notoria la fuerza propulsora del barco, aunque su utilización requiere de una maniobra especial que debe llevarse a cabo con cierta precisión a fin de evitar roturas. Existen dos tipos de spinnakers: el tradicional, utilizado para navegar con viento de popa y el gennaker o spinnaker asimétrico, que por su diseño avanzado permite navegar perfectamente con vientos aun por el través.
El spinnaker
Para utilizar un spinnaker es preciso colocar un elemento adicional llamado “tangón”, que tiene como finalidad “separar” el puño de amura de la vela para que ésta se infle correctamente. El tangón, que habi- tualmente suele ser de aluminio, se fija al palo mayor por uno de sus extremos. Por el extremo opuesto se pasa una de las dos escotas, que en este caso se llamará “braza”. La escota propiamente dicha se fijará al puño de escota directamente.
Para sujetar el tangón se utilizan dos cabos adicionales: uno que lo sostiene desde la parte superior (amantillo) y otro desde su parte inferior y evita que este se eleve (contra amantillo). La precaución a tener en cuenta, para evitar complicaciones a la hora del izado del “spi”, es revisar si toda la maniobra está colocada correctamente. Además se deben “repasar” los puños de la vela dentro de la bolsa (operación imprescindible para que no haya “enredos” cuando esta sale de la misma). Una vez hechas todas las comprobaciones, entonces sí procedemos a izar la vela lo más rápido posible y a reglar la escota y la braza convenientemente. Es de suma importancia que el spinnaker se “infle” de manera rápida, evitando así que al “gualdrapear” en exceso este se rompa o se “enchorice” en el estay proel.
La forma correcta de llevar el spinnaker se muestra en el esquema que sigue, teniendo en cuenta los siguientes detalles:
- El tangón debe colocarse siempre a 90º del eje del viento y perpendicular al palo.
- La vela debe conservar siempre una forma “simétrica”, cuidando de que ambos puños se encuentren a la misma altura.
- Mantener escota y braza levemente filadas para que la vela sea lo más “profunda” posible cuando se navega con vientos flojos.
- Prestar absoluta atención al timón, ya que el barco adquiere una potencia importante y cualquier racha puede desequilibrar el rumbo.
- Se debe tomar la precaución de poder “largar” la escota en forma inmediata en caso de ser necesario, ya que una fuerte ráfaga de viento podría hacer peligrar la estabilidad de la embarcación. Jamás se debe hacer firme en una cornamusa.
El gennaker
El spi asimétrico o gennaker es una vela muy utilizada en la actualidad, ya que brinda excelentes beneficios en cuanto a performance así como en sencillez de maniobra. Si bien el gennaker se asemeja al spi tradicional en lo que atañe a su construcción y a las telas utilizadas, podría decirse que en cuanto a su formato se parece a una genoa de grandes dimensiones.
La diferencia substancial entre el gennaker y el spi tradicional reside en que el primero presenta el puño de escota más alto que el de amura, por lo que recibe el nombre de asimétrico. Esto tiene una ventaja fundamental cuando se desea maniobrar con él ya que, al ser semejante a una genoa, puede utilizarse como tal y prescindirse del tangón, aunque esto último es a elección del usuario. Rigen en este caso las mismas recomendaciones de uso que para el spi tradicional.
Continua en: Curso de Timonel: partes del barco (clase 11).
Darío G. Fernández
Director del ISNDF
Si desea realizar el curso de timonel completo en nuestro instituto, puede contactarse con nosotros a través de nuestro teléfono Cel. (011) 15 5644-2888, o bien vía mail a secretaria@isndf.com.ar
Aprenda a navegar con nosotros, lo llevaremos a buen puerto!